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Descubre si estás siendo lo suficientemente limpia cuando tienes relaciones sexuales
Los órganos sexuales, tanto del hombre como de la mujer, son partes muy delicadas y se debe tener una higiene adecuada. A la hora de las relaciones sexuales muchas mujeres y hombres olvidan la limpieza porque se dejan llevar por el momento. Pero tener prácticas sexuales antihigiénicas pueden provocarte infecciones a ti y a tu pareja. ¿Sabes cómo cuidarte?
Antes las relaciones sexuales
Cuando vas a tener relaciones sexuales debes cuidarte antes para evitar olores molestos que pueden incomodarte a ti y a tu pareja y evitar infecciones vaginales que pueden hacer que tengas relaciones sexuales dolorosas. Lo primero que debes hacer es acudir normalmente al ginecólogo para asegurarte de que tu salud es buena y, en caso de tener una infección vaginal o cualquier otra enfermedad, saber cómo tratarla. También es importante lavar diariamente tus genitales, pero no en exceso. Puedes lavarte con jabones especiales pero hazlo de forma superficial en tus órganos externos para evitar irritaciones o que elimines la flora vaginal que tienes naturalmente y que ayuda a evitar infecciones.
Durante las relaciones sexuales
El condón es la mejor manera de cuidarte, es higiénico y además te va a proteger de contraer enfermedades de transmisión sexual y algunas infecciones. Además, si existen otro tipo de caricias en los genitales es importante que si se hacen con las manos, éstas estén limpias. Sobre todo cuando tú y tu pareja vienen llegando de la calle, es probable que sus manos tengan mugre y bacterias y si no se lavan las manos antes de iniciar con su intimidad sexual podrían infectarse. En el caso de que utilicen juguetes sexuales deben asegurarse también de lavarlos y que estén limpios a la hora de usarlos.
Una manera muy práctica de tener una limpieza correcta durante las relaciones sexuales es si éstas se llevan a cabo en la regadera, donde puede ser un momento muy excitante para ambos y a la vez se estarán limpiando.
Cuando practiques sexo oral con tu pareja también asegúrate de cuidar cortadas o infecciones en la boca. La higiene dental es también indispensable.
Después de las relaciones sexuales
En este caso no hay reglas específicas que deben seguirse en cuanto a la higiene, pero hay cosas que podrían ayudarte estar un poco más limpia.
Ir al baño después del coito puede ayudarte a que no se desarrollen bacterias y a evitar enfermedades o infecciones urinarias.
El semen es un líquido estéril por lo que no es necesario hacer una limpieza profunda de la vagina puesto que hacerlo no funciona para evitar el embarazo y aumenta el riesgo de producir una infección vaginal.
Cuando las relaciones ocurren en tu menstruación, es necesaria la limpieza de la sangre al terminar porque en este líquido se pueden desarrollar algunos microbios poco benéficos para la salud.